Si te has respondido sí a la pregunta con la que titulamos este post, sigue leyendo, te daremos algunas claves, que quizás desconozcas para que no se te resista.

Pero,  primero unas cuantas cosillas.

Lo primero que tenéis que saber es que nosotras no somos igual que vosotros, y en cuestión de sexo tampoco. Vosotros, como ya os hemos comentado en alguna ocasión llegáis a casa cansados,…nosotras pensamos ¡erróneamente, claro!, ufff….hoy libro, ¡fallo!, a vosotros eso del cansancio no os quita las ganas de echar un  polvo. Que llegáis estresados…, igualmente nos volvemos a equivocar: esto no influye para nada en vuestra libido, ¡os relajáis follando! Que hemos tenido bronca entre nosotros, ¡no pasa nada! ¡Con un polvito se hacen las paces!  Tenéis esa suerte, podéis disfrutar del sexo y de la pareja independientemente de lo que pasa a vuestro alrededor. Pero nosotras no tenemos esa dicha, tenemos que tener todo el alrededor perfecto para que nuestra libido actúe. Vamos, que si nos veis con mal día, ni lo intentéis, porque además de mandaros con viento fresco pensaremos que sois unos insensibles y encima nos mosquearemos con vosotros.

Dos, si tu chica ya ha manifestado poco interés sexual, los días de la regla no te molestes, la usará de excusa para no tener que hacer lo que en realidad no quiere hacer.

Tres, que habéis tenido hijos y empiezas a sospechar que ya llevan mucho tiempo en vuestra habitación, ¡no lo dudes!  usará como pretexto el que se puedan despertar.

Cuatro, si tú muestras interés en quedarte a ver la tele,  ella se va a la cama, o si tú quieres irte pronto a ella parece que hoy le interesa la programación, ¡está claro! ¡Evita situaciones de riesgo!

Cinco, si vuestras relaciones están programadas,  sábado noche, el deseo es inexistente.

Seis, intenta pasar muy rápidamente a coito y el juego no parece interesarle, está deseando acabar, y es que no quería empezar.

En fin…un poco deprimente. ¿Pero cómo reconvertir esto?

Si de verdad quieres echar un polvo con una mujer solo hay dos recetas posibles:

1-      Hazte apetecible a sus ojos: acompáñala en la vida.  No la abandones.

2-      Hazle el amor durante  el día para poder echar un polvo a la noche. No solo es tu pareja de la puerta del dormitorio en adelante.

¿Qué, os lo hemos puesto difícil? ¿Quién dijo que era fácil?