¿Te imaginas un autobús con algunos de sus asientos de color rojo pasión destinados a poder ligar con quien se siente a tu lado?

Pues, esta iniciativa la ha puesto en marcha, de manera experimental, la empresa de transportes Arriva en Copenhague. En la línea regular de autobuses urbanos han instalado asientos de color rojo, con reposacabezas incluidos para propiciar el flirteo entre los usuarios. Son los “asientos del amor”.

El objetivo es crear un mejor ambiente en los autobuses de la capital danesa a través de una invitación directa a flirtear y sonreír a los pasajeros que ocupan esas plazas.

Pues bien, parece que la idea está dando resultado y algunos rumores comentan que hay “hasta colas” para ocupar esos asientos.

La idea es muy divertida, ¿no? El viaje puede resultar, sin duda, mucho más agradable. Entra en juego el factor sorpresa de “¿quién se sentará?”. Dejando a un lado el que puedas conocer a alguien interesante o que pueda llegar a ser tu pareja, que por cierto, ¿por qué no va a ser posible?, ya se sabe que esa persona maravillosa que andas buscando puede estar en cualquier sitio,… pero si no es así, entablar conversación con alguien desconocido no está nada mal. Es una forma de ampliar el círculo social y hoy en día, en que cada un@ va a lo suyo,…

Sin duda es otra forma más de conocer gente, de ligar añadida a las nuevas maneras que en los últimos tiempos se vienen utilizando. Y tú, ¿te sentarías en uno de los “asientos del amor?

Y continuando hablando del amor os contamos una noticia que llega de Japón, donde se ha celebrado la primera boda presidida por un robot. Sí, tal cual. Al cura le han sustituido por un robot creado por la compañía Kokoro y que cuesta unos setenta mil dólares. El robot-cura, en cuestión, se llama I-Fairy. La pareja que se ha casado ha quedado muy contenta. Ahora, tiene que ser muy curioso oír la voz del robot, tan peculiar, celebrando la ceremonia. Nos preguntamos dónde quedará el romanticismo viendo moverse al susodicho, y viendo las lucecitas que se van apagando y encendiendo según va “hablando”. Todo es cuestión de gustos.

Buen fin de semana y aprovechemos el calorcito.