Oasis dio ayer en Madrid su primer concierto de los dos programados en España. Hoy lo hacen en Barcelona. Así lo vio el periodista de El País Carlos Marcos:
El grupo, sobre un escenario sobrio (sólo una pantalla detrás de ellos partida en tres), envaso un concierto repleto de sus grandes temas. Así cualquiera: Supersonic, Woderwall, Slide away (fantástica), Morning glory y media docena de temas de su nuevo y notable trabajo, Dig out your soul. Cuando Noel se ejercitaba con los punteos, el macarra de Liam montaba su numerito: se atornillaba en el centro del escenario, subía el cuello de su chaqueta abotonada a lo Sgt. Peppers, escurría sus manos en los bolsillos y miraba desafiante a alguien del público. Una de las veces pareció como si hubiese visto a su mujer abrazada de su mejor amigo. Esa mirada clamaba venganza. El concierto se cerró con una intensísima versión de I am the walrus, de sus amados Beatles. Oasis está tan en forma, que Blur, sus enemigos en los noventa, vuelve. Envidia cochina… [+]