No es un secreto que a Fernando Alonso le encanta montar en bicicleta. Es una de sus pasiones. Pero ahora además de montar como hobby, su preparador físico y su fisioterapeuta personal se lo han impuesto como método de entrenamiento para afinar su cuerpo y su tono físico y muscular.
Ahora pesa 67 kilos. Está mucho más fino y disfruta de sus paseos en bicicleta junto a grandes del ciclismo como Sastre, con quien se le ha visto ayer en Portugal compartiendo salida.
El asturiano acudió al hotel donde está concentrado el equipo ciclista Cervelo Test Team y saludó efusivamente a su amigo Carlos Sastre y al resto de los compañeros.
La visita del dos veces campeón de Fórumula Uno fue muy discreta y apenas llamó la atención entre el resto de los huéspedes del hotel Robinson Club Quinta da Ria. Alonso y Sastre salieron a pasear a media mañana en los alrededores de Tavira, donde hacen una ruta que durará más allá del medio día.