Abramos las puertas del blog a la última polémica. Resulta que Amorebieta y Del Horno estuvieron de fiesta el pasado jueves, que era un día propicio, porque se acumulaba el stress entre el partido del día anterior y el que había de celebrarse dos días después. Ha sido la comidilla esta semana de todas las televisiones locales. Por si faltaba algo, ayer un espectador del entrenamiento increpó al gallartino, que no estaba de humor, y allí mismo se enzarzaron en una disputa verbal más propia de una tasca que de cualquier otro sitio.
Me sugieren que les dé cancha a ustedes con estos dos temas, que dan para tanto que en Bilbao no se habla de otra cosa. Por si les interesan, aquí les dejo tres ideas para empezar el debate. Uno. Cuando uno ficha a un león fiero, es de esperar que ruja y que dé zarpazos. Dos. Cuando uno acaba pegando gritos a un jugador en un entrenamiento es que ha perdido el norte. Tres. No es mala noticia que hablemos de multas en estos temas.