La Real Sociedad ha decidido finalmente presentar su temido recurso contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. Aunque parece que este paso adelante en el contencioso que enfrenta a ambos clubes y al jugador no impedirá que se le tramite ficha al guipuzcoano, la decisión alarga el mal trago que vive Iban Zubiaurre hace año y medio. Qué quieren que les diga. No me parece bien. Ya lo dije hace tiempo y lo reitero. Es cierto que la mayor parte de la culpa del ‘caso Zubiaurre’ recae sobre Fernando Lamikiz pero eso no exime a la Real, que también está haciendo mal las cosas. El camino emprendido por nuestros vecinos -quién lo diría- pretende castigar aún más a Zubiaurre y amenazar a cualquier canterano que pudiera verse tentado por el Athletic. Porque hay que recordar que, según el jugador, cuando alertó de la posibilidad de marcharse todo fueron parabienes hasta que se enteraron de que el club por el que fichaba era el de Ibaigane.

Me parece delirante. Sé que algunos esgrimirán en su defensa que la Real defiende sus intereses pero reclamarle al Athletic 33 millones de euros es condenarle a la ruina si prospera el recurso. Es excesivo. Lo era, ya antes, negarse a negociar para solucionar el problema sin llegar a la justicia ordinaria. Y es un alarde de desmesura exigir ahora que se paguen 33 millones de euros por un jugador que ha disputado 14 partidos en Primera. Aunque sólo sea por el mero hecho de que ya es escandaloso que un empleado con el sueldo que tenía Zubiaurre tuviera esa cláusula de rescisión.

Antes de que vuelvan los derbis y los brindis al sol por la hermandad entre ambas aficiones, no estaría de sobra que la Real Sociedad cambiara su actitud con respecto al Athletic. Sería un comienzo asumir la ilegalidad que también a ellos les apunta el TSJPV en su sentencia, en la que considera abusiva una de sus cláusulas anti-Athletic.

Pecaba yo de ingenuo estos días cuando pensaba que Fuentes no nos daría el empujón final hacia el abismo, que bastante tenía con evitar que la Real sea el equipo más rico de Segunda, pero no ha sido así. Es hora de presentar nuestro recurso, que no dudo que estará preparado, y contraatacar. Dan ganas de soñar con que pierdan hasta los cinco millones de euros. Porque la categoría ya la han perdido. Aunque sigan en Primera.