El siempre brillante Woody Allen homenajea a la suerte en su última película. ‘Match Point’ se recrea en la parte incontrolable de la vida. Nos muestra ese momento en que la pelota impacta en la red durante un partido de tenis, cuando aún puede caer de cualquiera de los dos lados. Ayer, la suerte se alió con el Real Madrid y dejó que se llevara la victoria cuando más lo merecía el Athletic. Los rojiblancos acorralaron a los blancos como soñaba la afición pero luego, tras el revés del gol, no hubo manera. Si algo se puede apuntar en el ‘debe’ del Athletic es que perdonó en exceso. No tuvieron su noche. Consagramos la máxima fatídica de que “jugamos como nunca y perdimos como siempre”. Sólo nos queda confiar en que eso cambie para la vuelta, a la que estamos citados el jueves, a eso de las nueve de la noche.