Hay concesiones que no se entienden. Y hay miedos injustificables. Eso se desprede del homenaje que ofreció ayer en privado el Athletic a sus dos únicos mundialistas, Fernando Llorente y Javi Martínez. El club de Ibaigane les entregó una placa durante la tradicional comida que, cada año, celebra la entidad rojiblanca con motivo de la Aste Nagusia. Los dos campeones del mundo recogieron el presente a modo de reconocimiento y ofrecieron un discurso a sus compañeros, directivos y miembros del cuerpo técnico.
“Con este acto, desarrollado en la intimidad de un céntrico hotel bilbaíno, todo hace indicar que el Athletic cierra la puerta a un posible tributo en San Mamés en el primer partido de Liga, como barajó una parte de la junta y adelantó este periódico diez días después de que Iker Casillas levantara la Copa del Mundo en Sudáfrica. Sin embargo, otro sector de dirigentes consideró que un homenaje público, en ‘La Catedral’, aunque fuera modesto y sin grandes despliegues podría resultar perjudicial y, por este motivo, se decantaba por una acción «en privado». «Si se hace algo en el campo puede que se produzca una tremenda pitada de un grupo del público y eso no sería del gusto de nadie. Ni Javi ni Fernando, ni tampoco el club, se lo merecerían», apuntó una fuente del órgano de gobierno vizcaíno a EL CORREO”.
No se puede decir más claro, aunque habrá voces muy discrepantes con esta forma de ver las cosas, que de todo hay en la Villa del señor Azkuna. Y más cuando se vincula al Ahletic con la selección española, lo que algunos consideran como si se contaminara Ibaigane con la legionela.
Muchos aficionados, sin embargo, vemos en esta actuación ciertos complejos. ¿Por qué otros clubes pueden homenajear a sus mundialistas junto a la afición y el Athletic no se atreve a dar ese paso? Los complejos de siempre vuelven a circular e impiden un reconocimiento explícito de la parroquia de San Mamés hacia Llorente y Javi Martínez.
Me remito de nuevo a la información que publica hoy EL CORREO, porque queda todo bien explicado. “Sin descartar nada, la directiva parece haberse decantado por evitar una posible reacción airada contra Llorente y Javi Martínez en San Mamés, un campo donde conviven diferentes sensibilidades políticas, algunas contrarias a todo lo relacionado con lo que representa España. De todos modos, un portavoz del Athletic indicó ayer que este acto «no excluye otras posibles acciones. Será la junta directiva la que lo tenga que decidir. Además, el primer partido de Liga en casa (11-12 de septiembre) queda muy lejos»”. ¡Qué lástima!