Panorámica de 360º de la situación final de Philae | Crédito: ESA/Rosetta/Philae/cámara CIVA
En este blog nos gusta llamar a las cosas por su nombre, huyendo de la euforia, salvo que haya motivo. Cierto es que lo logrado ayer por la ESA es un hito que pasará a los anales de la historia. Aterrizar sobre la superficie de un cometa es un logro memorable. Lo malo es que las cosas no han salido como se esperaba.
La manera pensada para el aterrizaje ha fallado. Nos servirá de lección para futuras misiones. La panorámica que, por fin, ha logrado enviar Philae, nos muestra bastante bien cual es la situación en la que ha quedado el modulo de aterrizaje. La imagen que abre el artículo es la panorámica publicada hoy mismo y la imagen que sigue, la misma panorámica con una recreación de cual es la situación de Philae. La imagen superior derecha es cielo. Lo que indica que Philae ha quedado inclinada. Apoyada en una roca o en una pared, quizá.
Panorámica de 360º desde la posición final y recreación de Philae | Crédito: ESA/Rosetta/Philae/cámara CIVA
No está aún muy claro que es lo que ha sucedido. Lo que está claro es que Philae no se ha amarrado al cometa como estaba pensado. No se sabe si porque los sistemas han fallado o porque no encontraron algo a lo que asirse. O una combinación de ambas cosas. Parece ser que los dos arpones no se activaron. Lo que si parece claro es que Philae se detuvo a la tercera, tras rebotar dos veces contra la superficie. Esto le llevó a casi un kilómetro del lugar previsto para el aterrizaje, tras tomar tierra, debería haber disparado un arpón para asegurar su posición, algo que nunca se produjo. En base a los datos disponibles, Doug Ellison del JPL ha publicado el siguiente vídeo sobre como fue el aterrizaje. Vía Hominidos
Quizá pueda sorprender la altura que alcanzó Philae en el primer rebote, 455 metros. Pero es que al fallar el sistema de anclaje, la gravedad no es capaz de retener el módulo y eso hace que, por conservación de momento, vuelva a salir despedido prácticamente con la velocidad que llegó. En el segundo contacto, algo hizo que ya no botara tanto y a la tercera quedó ya sobre el terreno. El proceso total duró 2 horas. Estos son los horarios de los contactos, en UT: 15:33, 17:26 y 17:33.
Primer punto de contacto
Probable primer contacto sobre una imagen del 2 de septiembre de 2014 | Crédito: ESA/Rosetta/MPS/cámara OSIRIS
Desde esta otra perspectiva se puede apreciar mejor el tamaño de la pirueta. Viendolo así, en realidad ha habido mucha suerte. El modulo podría haberse perdido para siempre. Por un aterrizaje catastrófico o porque, directamente, el rebote lo hubiese llevado fuera del cometa:
Fuen te: Jason Major
En la rueda de prensa que han dado hoy, han explicado que, tras el primer contacto, punto rojo de la imagen, la posición final se encuentra dentro del rombo azul, cerca de la zona rocosa (arriba a la derecha en la imagen del 2 de septiembre) del gran cráter.
Las malas noticias no son tanto que el aterrizaje resultara tan accidentado como la situación final en la que ha quedado Philae. Por un lado, la zona parece ser muy sombría. Apenas da el Sol. Tan solo 3 horas cada 24 horas. Eso limitará seriamente la autonomía de Philae y quien sabe si la duración de la misión. Por otra parte, debido a lo inestable o poco segura que parece la posición y el anclaje, los técnicos de ESA no se van a arriesgar a activar el APXS ( espectrómetro de rayos X que iba a medir la composición del terreno bajo Philae) y parte del MUPUS (se iba a desplegar un brazo de un metro de longitud que se iba a perforar la superficie unos 30 centímetros). Podrían mover el modulo y dejarlo en una posición aún peor. Aunque eso son cosas que se irán viendo. De momento están tratando de ver si es posible hacer algo para que los paneles solares reciban más luz.
En fin, sigue la aventura. Cerramos con la que creemos que es la imagen más sugerente de todas las que se han recibido. Es, en realidad, parte de la panorámica con la que abríamos el artículo. Podríamos estar viendo la pared de un cráter situado en un cometa a 500 millones de kilómetros de la Tierra. Alucinante.
¿Pared de cráter en la superficie de un cometa? | Crédito: ESA/Rosetta/Philae/CIVA