Aunque el público en general no lo sabe, hay lluvias de meteoros más allá de las conocidas Perseidas de agosto. Salvo excepciones, no se trata de lluvias llamativas, por lo que, por regla general, solo las observan los muy aficionados.
No se trataba de una lluvia llamativa, pero desde 2006 ha experimentado un incremento de la actividad debido, según el experto Mikiya Sato, a que la influencia gravitacional de Júpiter han llevado material de pasos muy antiguos a la órbita terrestre. Del estudio de la lluvia de 2006 dedujo que se trataba de restos de los pasos del Halley en 1266 AC, 1198 AC y 911 AC. Para 2010, prevé un encuentro con los restos de 1266 AC y 911 AC.
Concretando, Mikiya Sato ha calculado dos máximos de actividad: uno centrado alrededor de las 9h TU (11h, hora oficial) del 21 de octubre. Este pasó ya, pero no era observable desde Europa. Estaba asociado a los restos de 1266 AC. El segundo tendrá lugar alrededor de las 4h TU (6h, hora oficial) del 25 de octubre, originado por los restos del paso de 911 AC. Esto es, en la noche del domingo al lunes. Justo antes del amanecer el lunes próximo, vamos.
La mala noticia es que la Luna va a estar escandalosamente grande y va a complicar mucho la visión. Pero va a ser una lluvia a seguir, sobre todo de cara a próximos años.
En fin, fácil no va a ser pero, si conseguís ver una, pensad en que estáis viendo la desintegración, en su caída a la Tierra, de un trozo del famosísimo cometa Halley.