>

Blogs

Íñigo Domínguez

Íñigo Domínguez

Lui (23): Friquileaks

Las filtraciones de Wikileaks son muy divertidas, pero sobre Italia han resultado decepcionantes. Habría sido una bomba si de repente se descubriera algo así: Berlusconi es un estadista serio y humilde que dedica sus noches al estudio de informes y a la lectura de los clásicos. Pero no: resulta que, según los espías, es vanidoso, incapaz y acaba medio muerto por sus noches de fiestas salvajes. Además es el portavoz de Putin en Europa, siendo Rusia un estado en manos de la mafia, y cabe la sospecha de que en sus numerosas visitas a este país se dedique a sus negocios personales. En fin, lo que todos comentamos en el bar. A Berlusconi todo esto le ha pillado en Libia con Gadafi, otro de sus amigotes, todos gente maravillosa. Como denuncia la oposición, ha ido 27 veces a Libia y nunca, por ejemplo, a India.

Berlusconi es lo que parece, no hay que darle muchas más vueltas, y en Italia las filtraciones friquis están al orden de día. El problema no es la falta de transparencia, sino el contrario: casi se agradecería un poquito de hipocresía, algo de miedo al qué dirán, para que se moderara un poco. Hasta ahora no habíamos hablado del último escándalo, el caso Ruby (chica de la foto), pero ya lo sabrán más o menos todo. Aunque a lo mejor es mucho suponer, porque lo que más ha quedado en el aire es el colorín de sus fiestas con chicas y el ‘bunga bunga’. Es un peligro más del sensacionalismo de la información y de que con Berlusconi todo parece gracioso, aunque no tenga ninguna gracia. Pero no se pierdan, la esencia del asunto es la llamadita de teléfono del día 27 de mayo, un jueves. Es el Ruby thursday de Berlusconi.

Lo resumo brevemente. El pasado 27 de mayo, jueves, el primer ministro italiano se pringó en persona por una señorita llamada Ruby Robacorazones. Era una menor marroquí de 17 años que había asistido a alguna de sus fiestas y estaba detenida por robar no corazones, sino 3.000 euros de una casa donde había pasado la noche. Berlusconi hizo una llamadita a las once de la noche a la comisaría central de Milán, les metió una trola diciendo que la chica era una pariente de Mubarak, el presidente egipcio, y que por favor se la pasaran a una persona de confianza que iba para allá. Apareció la famosa Nicole Minetti (chica de la foto), ex-azafata sexy de televisión que el primer ministro conoció en su odontólogo como higienista dental. A los tres meses la coló de candidata en las listas electorales de Lombardía y ahora es diputada regional. La fiscal de menores a la que le tocó el caso dijo que enviaran a Ruby a un centro de acogida de menores. Según dijo luego, no se creyó ni de lejos lo de Mubarak: «Y yo soy Nefertiti, reina del Nilo», argumentó. Dio igual, en comisaría decidieron poner a la chica en libertad, argumentando que no había plazas en ningún centro de acogida, aunque luego ha quedado demostrado que no era así. La responsable, por si acaso, se cuidó mucho de firmar la orden para no comerse el marrón. Minetti se hizo con la custodia de la menor, pero ni llegó a llevarla a su casa. La dejó por ahí. De hecho Ruby fue detenida de nuevo una semana después. Además de Minetti, son investigados por favorecimiento de la prostitución dos amigos de Berlusconi: Lele Mora y Emilio Fede, ambos inenarrables, aunque ya hemos hablado de ellos alguna vez. Mora (al que ven aquí al lado despanzurrado con sus efebos haciéndole masajes en los pies) es un rey de la farándula cutre, manager de estrellas y nuevos talentos, y Fede es el director eterno de uno los telediarios (por llamarlos de alguna manera) de Berlusconi. La sospecha es que los dos le seleccionaban lotes de chicas para enviárselas a casa.

Por cierto, hay gran tensión en Italia por si Wikileaks desvela que Ruby en realidad no es la sobrina de Mubarak. Aunque por aquí algo se sospechaba ya. Miren esta pancarta que le pusieron a Berlusconi en San Siro los aficionados del Inter:

Traducción: “Silvio, déjanos el número del móvil… Si nos arrestan en el estadio alguien nos tendrá que ayudar”.

También tuvo mucha coña la lectura musical que hicieron del asunto Elio e le Storie Tese: nada de Wiki, en Italia triunfa el ‘Bunga bunga waka waka’.

No hace falta mucha traducción, gracias a los subtítulos. Lo que declama en medio de la canción es: “Y no importa quien seas, ni el trabajo que hagas, en estos tiempos de crisis es importante reír, sonreír y festejar, así que festejemos, yo, tú, Lele, Fede,…”. Eso, eso, alegría. En Italia lo más saludable siempre es mejor tomárselo por el lado divertido, porque de todas maneras nunca va a pasar nada. Esta vez tampoco. ¿Dimitir? Por favor, estamos en Italia. Al margen de bromas, aunque sigamos fuera de lo serio ¿cuál fue la reacción de Berlusconi? Esta:

Traducción:

Le preguntan por la llamada a comisaría.
-Esto es una trola inventada por vuestros periódicos. Yo he ayudado, pero hay ayudas y ayudas. Si se me pide que indique una persona que es necesaria para confiar una custodia, yo llamo a esta persona y digo que esta persona está llegando a comisaría. Esto es todo. Lo haría también por usted aunque me haga estas preguntas.
Le replican que así ha influenciado en el caso.
-No, en absoluto, porque además sé los poderes del primer ministro, que en Italia no tiene ninguno, ninguno. Por tanto no podría haber pensado en ejercitar un poder que simplemente no tengo.
¿Qué hacía la Minetti en comisaría?
-Fue enviada por mí para ayudar a una persona que así podía no ser entregada a una casa de acogida o a la cárcel, que desde luego no es una cosa bonita, y podían darla en custodia a ella. Como esta persona me había presentado un cuadro de vida trágico yo he decidido ayudarla como ayudo a todos los que me contactan cuando tengo la posibilidad. No he regalado coches, todo cosas que no son verdad…
¿Pero la ha invitado a cenar?
-Creo que cuanto ha declarado esta persona es suficiente. No quiero volver a hablar de ello. Leo sonriendo las trolas de los periódicos.
Le preguntan cuándo aclarará lo que pasa en su casa.
-No tengo nada que aclarar. En mi casa entran solo personas decentes y sobre todo se comportan correctamente. En cuanto a mi capacidad de ser anfitrión, y de ser un anfitrión irrepetible, quizás único, estoy muy orgulloso. Soy una persona jocosa, llena de vida, amo la vida, amo las mujeres…
-Así que nada de bunga bunga.
-El bunga bunga es un viejo chiste, bellisímo, que ma ha hecho reír mucho, también esta vez…
Le preguntan si no se plantea un mínimo de autocrítica por su estilo de vida.
-Yo tengo una vida terrible, con esfuerzos inhumanos, trabajo como ninguno, hasta las dos y media de la madrugada, a la una y media me llegan los periódicos, no sigo el consejo de la señora Thatcher y los leo y naturalmente no me quedo de buen humor, escribo tarajetas con indicaciones para los grupos parlamentarios, partido, etc… y a las dos y media duermo. A las siete y media estoy en pie y sigo trabajando, también el sábado y el domingo. Si yo, de vez en cuando, siento la necesidad de una velada de distensión, como cuando una anécdota o un chiste, por terapia mental, para limpiar el cerebro de todas las preocupaciones, esto forma parte de mi personalidad y no hay nadie que podrá cambiar a mi edad mi estilo de vida. Añado que es inhumana la capacidad de resistir a los ataques que me ha dirigido la izquierda en estos años, porque se ha dado cuenta de que la presencia de Berlusconi constituye la imposibilidad de llegar al poder y por eso me ataca con una fuerza extraordinaria. Es más, el último refrán que me han dicho de la izquierda: «Un ataque al día, quita a Berlusconi de en medio». Pero exageran, y yo digo: «Uno o dos ataques al día, me hacen siempre estar ahí». Yo estoy aquí. Buon lavoro!

FIN

Vamos, que no hay trampa ni cartón. Él es así y hace estas cosas. Los italianos ya lo saben y luego le votan. ¿Dónde está el problema? El otro día uno se podía encontrar, haciendo zapping, con una entrevista con otra prostituta (y van…) llamada Nadia Macri que contaba sus noches con el primer ministro. Casi ni era noticia. También relató que la enviaron a Emilio Fede con otro carromato de chicas para que hiciera una preselección. Debe de saber ya los gustos del jefe, tanto tiempo haciéndole los informativos a la medida. Pero lo más asombroso es que esta chica contaba todo como Cenicienta tras pasar la noche en casa del príncipe azul, encantada de haber sido elegida. Según Berlusconi, ha sido pagada, pero no por lo que imaginamos todos, sino para mentir. Lo explicó así:

«¿Qué puede empujar a una chica a declararse prostituta ante el mundo y por tanto no poder tener la posibilidad de un trabajo o de un marido normal, además de no poder ni siquiera hacer más la prostituta, porque nadie se fiará ya?».

Irrebatible. Aunque nuestro hombre se equivoca: pasar por puta en Italia da óptimos resultados laborales. Es más, parece uno de los mejores métodos de encontrar trabajo y encima ser famoso. Todas estas chicas que acuden en peregrinación a casa del gran jefe a ver si le sacan un puesto en la casa de ‘Grande Fratello’ (Gran Hermano) o cualquier cosa que les ponga en la tele son un signo de la Italia actual. Es un modo de pensar y una estética que contamina toda la sociedad. Veamos, por ejemplo, el inicio de la jornada laboral en un centro de explotación de teleoperadoras publicitarias en ‘Tutta la vita davanti’ (Paolo Virzi, 2008), un agudo análisis del precario mundo laboral de la juventud y los valores en alza:

En fin, que ya ven que no hacía falta Wikileaks. Berlusconi se basta solo para filtrarse a sí mismo. Ya dice que a veces se corre una juerga, pero el resto del día se lo pasa trabajando como un loco. Por ejemplo, el otro día volvieron a pillarle desprevenido y le fotografiaron la agenda del día. Quizá recuerden que hace un tiempo -30 de julio de 2008- pasó lo mismo y aquello estaba lleno de amigotes, negocios privados y señoritas. Pues estamos en lo mismo: esta vez, a las dos de la tarde, cita con Elena Russo. Es otra chica guapa. Quizá la recuerden de otro chascarrillo que contamos aquí. A lo mejor Berlusconi quería verla para hablar de la inflación galopante, pero desde luego no parece un esfuerzo sobrehumano en su agenda.

Al hilo de todo esto vamos a hablar de otro de los episodios recientes más divertidos. Lo contamos porque refleja bastante bien los esquemas de funcionamiento y los personajes del mundillo berlusconiano, aunque no deja de ser algo muy italiano que ha pasado toda la vida. Aunque seguramente no a estos niveles de desparpajo. Se trata de:


El culebrón búlgaro de Dragomira

Como ven, la historia empieza en septiembre en el último Festival de Venecia. Sin que nadie sepa por qué se metió en el programa a última hora, fuera de toda sección oficial o programa paralelo, una opera prima búlgara producida, dirigida, escrita e interpretada por una tal Michelle Bonev (aunque su nombre real es Dragomira Boneva). Es la chica que desembarca en el Lido toda galana. Pero eso no es nada: se inventaron para ella una premio extrañísimo, tan raro que era para cortometrajes, aunque esta peli no lo es. Organizaron la solemne entrega casi de estrangis, en la sala más minúscula, la Passineti, a las cinco de la tarde de un domingo, con cuatro gatos, como ven en la foto de abajo. Pero, atención, si se fijan verán que aparecieron por allí nada menos que dos ministros italianos -Mara Carfagna, de Igualdad de Oportunidades, en pie en el estrado, y Gianfranco Galan, de Políticas Agrícolas-, además del ministro de Cultura búlgaro, Vejdi Rashidov, que había proferido estas impactantes declaraciones: «Espero que este filme traerá a Bulgaria una fama mundial como la que Kusturica dio a Serbia». Esperamos ansiosos el fenómeno, pero de momento la película no se ha estrenado ni en Bulgaria. Entretanto, una diputada del PDL, el partido de Berlusconi, llamada Deborah Bergamini (quédense con el nombre para luego), entregó a esta buena señora la placa del premio, que ponía:

«En ocasión del 60 aniversario de la Convención Europea para la Salvaguardia de los derechos del hombre y de las Libertaddes Fundamentales, el Ministro de Cultura ha asignado el premio especial Action for Women al filme de co-producción italo-búlgara ‘Goodbye Mama’ de Michelle Bonev».

Impresionante palabrería. Pero son mejores los números. Ahora se ha sabido, según afirma el ministro de Cultura búlgaro, que fue el Gobierno italiano quien pagó el viaje a la señorita Dragomira y una delegación de 32 personas. ¿La factura? Nada, 400.000 euros, con alojamiento tres días en el ‘Cipriani’ y comilonas incluidas. Y es que además la peli es una co-producción con la RAI, que puso un millón de euros, aunque ahora nadie sabe quién lo autorizó. Es curioso, porque la película solicitó financiación pública en 2008 como opera prima al ministerio de Cultura y fue rechazada, «porque es superada por otras con más merecimiento».

Pero bueno, se preguntarán, ¿quién este genio desconocido del cine alternativo, este valor en alza del séptimo arte, quién es en definitiva esta señorita búlgara? Lo explicó el propio ministro de Cultura búlgaro en una entrevista: «Es una amiga muy querida del primer ministro búlgaro y de Berlusconi». Seguro que no se lo esperaban. El proprio ministro de Políticas Agrícolas, Gianfranco Galan dijo al entregarle el premio que Berlusconi le había encargado que le diera un caluroso abrazo.

Hagamos ahora un poco de aburrido trabajo de documentación para comprender el contexto. Dragomira les suena a los italianos -pero en morena, como en la foto- porque en 2003 apareció, también por sorpresa, como co-presentadora del programa del Festival de Sanremo en la RAI. Como experta de ‘look’. Fue un escándalo porque llegó como enchufada del director general de la RAI, Agostino Saccà. Quizá les suene este nombre, luego volveremos a él. El presentador oficial del festival, Pippo Baudo, vio las imágenes de su prueba y se quedó de piedra. Armó un lío tremendo por la imposición y Dragomira luego fue «redimensionada», como se dice en italiano. Es decir, redujeron su protagonismo a lo minúsculo imprescindible y quedó para la posteridad como «la enchufada búlgara».

Michelle Bonev había salido de la nada. Decía que era asesora de imagen de la familia Baldwin, Lionel Ritchie, Gloria Stefan y Spike Lee (ya saben lo obsesionado que está Spike Lee con su imagen). También aseguraba haber escrito dos guiones para la Disney. La cosa acabó en el Parlamento con una petición de explicaciones de su extraño fichaje. Pippo Baudo, el presentador, muy deprimido, respondió esto tras el festival: «En el currículum se presentaba como amiga de Spielberg y Michael Douglas. Luego hemos descubierto otro que esperemos que no sea verdad…». Y ahí se quedó la cosa. Tiempo después a Saccà le preguntaron si Dragomira era su amante y dijo que «hasta 2003 no». Acerca de después de 2003 se limitó a decir que era un caballero, pero que tampoco. Reveló que se la había presentado un dirigente del Milán, el equipo de fútbol de Berlusconi: «Me habló de su infancia difícil, de la pobreza, parecía lo que no era: una pequeña cerillera escapada del infierno». Ya vemos que la técnica se repite, pues Ruby a Berlusconi le hizo lo mismo. Debe de ser porque siempre hay hombres de corazón dispuestos a ayudar a una buena chica.

Dragomira luego se dedicó al cine, series y hasta escribió una novela que le publicó Mondadori, editorial propiedad de Berlusconi. ‘Panorama’, el semanario del magnate, le hizo una crítica elogiosa, aunque el firmante, años después confesó su indignación porque el director, Carlo Rosella, le había cambiado el artículo de arriba a abajo «haciéndola pasar por una Yourcenar». El libro le había parecido una auténtica porquería. Rosella, para que se hagan una idea, fue el que trucó una foto de Berlusconi en la portada de la revista para ponerle más pelo.

Sin embargo cuando más sonó el nombre de Dragomira fue en 2007, al aparecer en las famosas grabaciones telefónicas de Agostino Saccà, que para entonces era director general de series de la RAI. En una conversación salía a la luz que Dragomira estaba empeñada en que la RAI le produjera una serie como fuera y Saccà estaba harto de sus presiones, que definía un intento de chantaje. En fin, dejémoslo, pero aquellas grabaciones fueron famosas porque Berlusconi en persona, que entonces estaba en la oposición, llamó a Saccà para que enchufara unas cuantas señoritas en series de televisión. Entre ellas Elena Russo, la que tenía cita el otro día a las dos de la tarde. Otra, por ejemplo, era para contentar a un senador del PD que estaba intentando trabajarse para que se pasara con él y hacer caer al Gobierno de Prodi, que sólo tenía una mayoría por tres escaños en el Senado. Ahora anda haciendo lo mismo, fichando diputados del enemigo ante la crucial moción de confianza del día 14. Esta es la frase de Berlusconi al teléfono:

«Después está la Evelina Manna. No es para mí, es una cosa… digamos… estoy intentando conseguir la mayoría en el Senado, y esta Evelina me la ha pedido uno con quien estoy negociando»

La tal Evelina la tienen aquí al lado y esto era en junio de 2007. El Gobierno de Prodi cayó en enero de 2008, aunque se bastó solo con sus líos internos, pero nunca se ha sabido para quien era el favor de la señorita. De todos modos en septiembre Berlusconi volvió a llamar a Saccà porque tenía otro pequeño problema:

«A esa loca de Antonella Troise se le ha metido en la cabeza que la odio, que he bloqueado su carrera artística y anda diciendo cosas de locos. Te pido esta cortesía, hazle una llamada…»


En noviembre de 2007 salieron más grabaciones a la luz de las que emergía una alianza secreta entre la RAI y Mediaset, el imperio televisivo de Berlusconi, para coordinar programaciones y los enfoques de las informaciones entre 2004 y 2005, siendo el magnate primer ministro. Viva el conflicto de intereses. Entonces el director de Mediaset era Carlo Rosella, sí el de la revista ‘Panorama’. En la RAI llevaba el tema la directora de marketing estratégico, Deborah Bergamini. No es que fuera una sorpresa: esta chica había sido antes asistente personal de comunicación de Berlusconi en el Gobierno hasta 2002, cuando entró en la televisión pública. Se armó un escándalo, la RAI abrió una investigación interna y Bergamini fue suspendida. Pero bueno, volvió a la casa del padre y ahora es diputada del partido de Berlusconi. Fue quien entregó la placa a la cineasta Dragomira. También estaba en la ceremonia Carlo Rosella.

Por cierto, en la dirección de la productora de Dragomira, Romantica Enterteinment, así como en la película, está también una tal Licia Nunez (chica de la foto). Es una de las chicas que aparecieron en el escándalo de Patrizia D’Addario, dentro de la investigación sobre las hornadas de señoritas que enviaba a Berlusconi el empresario Gianpaolo Tarantini para ganarse su confianza y obtener favores. Licia Nunez fue una de las chicas del ‘pack’ enviado al famoso fin de semana que Berlusconi se retiró a someterse a curas especiales para el mal de espalda en un centro de relax de lujo de Todi, dando plantón a la asamblea general de la ONU, donde tenía que intervenir, y al cierre de la crisis de Alitalia. Nunez negó ser prostituta y dijo que Berlusconi sólo es para ella «un paterno asesor artístico». Esta faceta suya no sale en Wikileaks.

Bueno, y aquí lo dejamos porque si no no acabamos nunca. Según un ex-diputado de Berlusconi que lo ha dejado decepcionado de lo que ha visto, el inenarrable Paolo Guzzanti (padre de los cómicos Paolo y Sabina Guzzanti), Italia no es una democracia sino una ‘mignottocrazia’ (algo así como putocracia o ramerocracia). Acaba de sacar un libro con ese título. Es un término que acuñó en 2008 al poner el grito en el cielo cuando Mara Carfagna -la que entregó el premio a Dragomira- fue nombrada ministra de Igualdad de Oportunidades -femeninas, se entiende- pues sus únicos méritos conocidos eran ser mona. Clamó lo siguiente:

«¿Es lícito o no que en un Estado sea ministra una persona que como único mérito específico tiene el haber satisfecho al jefe de Gobierno? ¡Abajo la mignottocracia, viva la república!»

Carfagna lo denunció. Por si no recuerdan los méritos de la ministra, además de tener una carrera de Derecho, fue sexta en Miss Italia, chica de adorno de programas de televisión hasta triunfar con un tórrido calendario sexy (en la foto de aquí al lado). En una fiesta de enero de 2007 en la que Berlusconi dijo más tonterías que de costumbre, declaró sobre ella: «Si no estuviera casado me casaría con ella inmediatamente». la hizo ministra, que no se sabe que es peor. Luego ella se cortó el pelo y se puso de chica formal. En cualquier caso, el comentario desencadenó una indignada carta pública de mujer, Veronica Lario, exigiendo a su marido una disculpa pública. Fue el inicio del fin, culminado en mayo de 2009 con el escándalo de Noemi Letizia, y al final la cosa acabó en divorcio.

En cualquier caso, que sepan que todas estas revelaciones forman parte de una conspiración para atacar a Italia. Lo ha dicho el Gobierno, muy serio, de forma oficial. En este ataque se combinan lo de Wikileaks, la atención mediática exagerada por las basuras de Nápoles -que ahí siguen-, por los derrumbes de Pompeya y las revelaciones de las alegres pandas de chicas.

Acabamos con un fragmento de ‘Il caimano’ (Nanni Moretti, 2006):

Sinopsis: Un productor venido a menos y una guionista combativa están intentando poner en pie una película sobre Berlusconi, tema tabú para el cine italiano, pero sólo encuentran obstáculos, excusas y evasivas. En esta escena van en el coche con un actor famoso, el propio Moretti, con la música a todo volumen. Ella interrumpe los cánticos para decirle que le gustaría que fuera el protagonista.
-Gracias, gracias… (Sigue cantando) Perdonad, no bajo la música, porque me gusta muchísimo… Sí, gracias, pero una película sobre Berlusconi, es que no… Todos saben ya todo sobre Berlusconi.
-¿Con estas televisiones?
-Sí ya, pero quien quería saber sabe, luego quien no quiere entenderlo… venga… ¿Qué quieres? ¿Informar más? Se sabe todo.
-Entonces ¿qué hacemos? ¿No hacemos nada? Así gana otra vez.
-Pero es que de todas maneras él ya ha ganado. Berlusconi, hace veinte años, treinta, con sus televisiones, nos ha cambiado la cabeza… Y de todas maneras no estoy de acuerdo, hay algo en vuestro guión que no me convence…
-¡Pero si no lo has leído!
-¡No lo he leído, es verdad! Pero es como si lo hubiera leído…
-¡Léelo! ¿No? Y luego…
-…es como si lo hubiera leído porque sé lo que hay escrito, lo que el público de izquierdas quiere oír: Berlusconi que se hace el lifting, que le sale mal, el trasplante de pelo, que le sale bien, todos a reír…
-Pero ésa no es mi película ¿eh?
-…Pues bueno, no es tu película, pero todos a reír, ¿y qué es lo que tiene de gracioso?… Y además yo es que tengo otro proyecto, otro proyecto… Estoy escribiendo…
-Bueno, a lo mejor nos hemos equivocado Bruno, ¿Volvemos a trabajar?
Moretti le dice al productor que la chica se ha ofendido,que tiene carácter, y él le replica que es buena.
-Sí, un poco antipática, por eso me gusta… Pero yo estoy escribiendo una película cómica en la que estoy muy interesado, una comedia que me gusta muchísimo…
-¡Ah, una comedia! ¿Y te parece el momento de hacer una comedia?
-Ah, Teresa, siempre es el momento de hacer una comedia. ¡Siempre!
Y se pone a cantar.

Cantemos, cantemos todos. Waka waka bunga bunga.

Otro sitio más de Comunidad de Blogs de elcorreo.com

Sobre el autor


diciembre 2010
MTWTFSS
  12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728293031