Pasolini, 33 años después | Íñigo Domínguez - Blog elcorreo.com >

Blogs

Íñigo Domínguez

Íñigo Domínguez

Pasolini, 33 años después

“No sé por qué, pero nunca he ido al lugar donde asesinaron a Pasolini” (‘Caro diario’, 1993, Nanni Moretti):

Ayer se cumplieron 33 años de la muerte de Pier Paolo Pasolini. Al menos han adecentado el lugar y hubo un pequeño acto. Por allí andaba también uno de sus asesinos, Pino Pelosi, el único que pillaron. Tras 26 años de cárcel, en su trabajo social de resinserción le ha tocado ser jardinero del recinto. Ha dicho, para variar y como otras veces, que un día de estos dirá la verdad, que había más personas, que lo va a contar todo. Otro misterio italiano que no acaba nunca.

En estas mismas dunas de Ostia poco tiempo antes Pasolini concedió una entrevista en la que exponía sus funestas predicciones sobre el camino que había tomado Italia. Son las mismas ideas que se ven en sus escritos de sus últimos años y que hoy dan escalofríos al leerlas, por su denuncia del poder de la televisión. Qué diría hoy de Berlusconi.


Sinopsis: “…ahora sucede lo contrario. El régimen es democrático, pero esa aculturación, esa homologación que el fascismo no consiguió obtener en absoluto, el poder de hoy, de la sociedad de consumo, lo consiogue perfectamente, destruyendo las realidades particulares, quitando realidad a los diversos modos de ser hombres que Italia ha producido en modo históricamente muy diferenciado. Y esta aculturación esta destruyendo Italia. Y puedo decir sin duda que el verdadero fascismo es este poder de la sociedad de consumo que está destruyendo Italia. Esto ha ocurrido tan rápidamente que no nos hemos dado cuenta, ha ocurrido todo en estos últimos cinco, seis, siete, diez años,… Ha sido una especie de pesadilla en la que hemos visto Italia destruirse, desaparecer, y ahora que nos despertamos, quizá, de esta pesadilla y mirando alredoder nos damos cuenta de que ya no hay nada que hacer”.

Bueno, terminamos con una película. Aunque Pasolini hacía de todo: poesía, teatro, ensayo, artículos de prensa, jugaba al fútbol,… El cine de Pasolini es a veces difícil, con serias incursiones en el tostón. Claro, era un intelectual. Pero tiene muchísima potencia, libertad, desgarro, poesía, amargura, según… Hay que buscar.

Una de las cosas más bonitas que hizo, y menos conocidas, fue un capitulito escondido en una de esas películas corales, de muchos directores, que se hacían en aquellos años. El filme se llama ‘Capriccio all’italiana’ (1967), y su capítulo ‘¿Qué son las nubes?’. Cuenta la historia de un espectáculo de marionetas donde se recita ‘Otello’, aunque las marionetas no entran en sus papeles. Otello (Ninetto Davoli) no comprende su papel y dialoga con el malvado Yago (Totó):


Sinopsis:

-Yo soy un asesino, soy un asesino, ¿quién se lo iba a creer? ¡Soy un asesino! ¡Mierda! ¿Pero por qué? ¿Pero por qué hago las cosas que me dice Yago, por qué soy tan estúpido?
-Quizás porque en realidad eres tú quien quiere asesinar a Desdémona.
-¿Cómo? ¿Yo quiero asesinar a Desdémona? ¿Por qué?
-Quizá porque a Desdémona le gusta ser asesinada.
-¿Ah sí? ¿Es así?
-Quizás es así.
-¿Pero cuál es la verdad? ¿Lo que pienso yo de mí? ¿O lo que piensa la gente? ¿O lo que piensa ese de ahí adentro?
-¿Tú que sientes dentro de ti? Concéntrate bien. ¿Qué sientes?
-Sí, sí, siento que hay algo.
-Eso es la verdad. Pero, sssh, no hay que nombrarla, porque apenas la nombras, ya no está.

Al final del cuento, las marionetas acaban en un basurero, donde ven las nubes por primera vez.

Fue la última aparición en una película del gran Totó. Con Pasolini comenzó la reivindicación artística de Totó, hasta entonces despreciado por la crítica como un actor de segunda fila de cine popular.

Otro sitio más de Comunidad de Blogs de elcorreo.com

Sobre el autor


noviembre 2008
MTWTFSS
     12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930