A mí me parece que hay tantos blogs que sólo se leen los de conocidos, o alguno muy especializado si alguien es, por ejemplo, coleccionista de sobres de azúcar, que existen. A mí que me lean los amigos ya se me antoja un objetivo difícil. Todos los demás serán bienvenidos, aunque no me acabo de hacer a los insultos. A mí lo que me gustaría sería un blog anónimo, para poder decir tonterías y barbaridades, como uno más de Internet. Por cierto, que se les llama usuarios, no lectores. En general, están muy mitificados, pues se les ve como consumidores, y todos los medios se vuelcan en saber qué piensan y que pinchan, cuando en realidad son gente como usted y como yo que se mete en Internet en horario de oficina a pasar el rato. De hecho, las estadísticas dicen que Internet se usa de lunes a viernes, y el fin de semana se desploma, porque la gente se dedica a lo suyo. Menos mal. Además, se usa sobre todo para el porno y las predicciones meteorológicas, dos obsesiones que crecen con la edad. En general, yo creo que se nota mucho la diferencia entre los blogs de vocación y los obligados, pero haré lo posible para que no se note.
Humildemente, intentaré ser breve, no ponerme pesado y contar cosas de Italia, lo que significa reír y llorar. Por eso mismo, para el primer día, no se me ocurre mejor manera de comenzar que ésta.