Tratar de adivinar lo que pasa por la cabeza de un niño es sencillamente imposible. Sus pensamientos son simples pero al mismo tiempo demasiado complejos para un adulto. Recuerdo que hace muchos años me regalaron un par de libros de El pequeño Nicolás, de Sempé y Goscinny (el paralelismo con Manolito Gafotas es imposible de […]