Recuerdo que, cuando este blog empezó andar, Óscar Otálora escribió una entrada muy divertida sobre los argumentos de las últimas decenas de novelas, ésas que, nada más verlas, te sube una arcada. Ya se sabe: un poquito de rollo esotérico, un muertito o dos por lo de la intriga, y algo de Leonardo, de la […]