Los aficionados habituales del motor sabrán perfectamente de quién les hablo, pero quizá haya otros que sólo miren habitualmente al mundo de las cuatro ruedas, así que se lo presentamos: Joan Lascorz Moreno, pìloto catalán del Mundial de Superbike que actualmente vive con una tetraplejia.

Hace poco más de un año se entrenaba con su moto en Imola cuando tuvo un brutal accidente. Se cayó a más de 200 kilómetros por hora y chocó contra un muro, fracturándose la columna vertebral. Desde entonces se sirve de una silla de ruedas para desplazarse.

Actual comentarista de Teledeporte para que el fuera su campeonato, la revista Solo Moto ha publicado recientemente una de las escasísimas entrevistas que ha concedido desde su nueva situación. Donde cuenta cómo vivió aquel momento, que por cierto tiene perfectamente presente en su memoria.

Pero, más allá del relato de la vivencia, es fundamental quedarse con unas palabras que pronuncia. ‘Promotores, circuitos y FIM deberían dar una vuelta de tuerca a la seguridad. Sé que se lo toman muy en serio, pero en Imola resultó no ser suficiente, y creo sinceramente que mi lesión se podría haber evitado. Cuando uno va al límite, caerse es normal. No lo es chocar contra un muro a casi 200 km/h’.

Cuando uno va al límite, caerse es normal. Esto ocurre cada día, en cada circuito, en cada certamen donde hay pilotos profesionales montando máquinas mucho más veloces que cualquiera que pueda comprarse para viajar por la calle.

La estadística de incidentes de alto rango es baja, sí. Pero tiene mucho más que ver con la inmensa capacidad de la gente que pilota las motos que con la seguridad. Que se ha mejorado muchísimo, pero que sigue teniendo también muchas lagunas.

Hay circuitos que, por no tener dinero para cambiar el asfalto, están muy bacheados. Otros que directamente se han salido de los calendarios oficiales pero que siguen albergando entrenamientos privados. Y algunos más que fueron innovadores en materia de prevención en los 90, pero de eso hace 20 años.

Las caídas a 200 no van a poder evitarse por mucho que quienes las protagonicen se llamen Lorenzo o Rossi. Pero los responsables de los campeonatos conocen de sobra qué trazados están al cien por cien y cuáles no. Es muy duro que Lascorz haya tenido que perder la movilidad en las piernas para denunciar estos temas. Pero, ya que lo ha hecho, al menos que le hagan caso.