Mi detective favorita | Colomba. Todo mujeres - Blog elcorreo.com >

Blogs

Itsaso Álvarez

Colomba. Todo mujeres

Mi detective favorita

Puntualmente, con poco más de un año entre título y título, la autora norteamericana Sue Grafton (Louisville, Kentucky, EE UU, 1940) ha colocado en las librerías las nuevas aventuras de Kinsey Millhone, la investigadora privada convertida ya en un personaje clásico de las novelas policíacas, capaz de superar los envites de las modas negrocriminales suecas y de cuanto recién llegado al club de la intriga se refiera. Algo tendrá esa solitaria detective cuando se permite el lujo de alcanzar en plena forma el título número 21 de su serie (ya va por la ‘V’, aunque el último libro traducido al español es el que corresponde a la ‘U’ de ‘Ultimatum. Tusquets, 20 euros).

Kinsey Millhone, la protagonista del ‘Alfabeto del crimen’, llegó a España en 1990 como protagonista de ‘A de adulterio’, novela que ocho años antes se había publicado en Estados Unidos como primer ejemplar de una serie nacida con un peculiar y difícil reto: un libro anual y con títulos que debían seguir el orden del abecedario. Había nacido la saga. Su autora, Sue Grafton, suele comentar con humor que tomó esa original decisión para superar la depresión que le causó el divorcio de su primer marido, aunque también reconoce que la idea surgió tras la lectura del abecedario macabro del ilustrador Eduard Gorey.

A lo largo de 29 años de relación literaria con su investigadora, Grafton ha sido muy meticulosa para evitar repeticiones o coincidencias argumentales. Ha elaborado un registro de las causas de muerte ocurridas en sus novelas, del sexo de los asesinos, de los lugares y motivos de esos homicidios.

Además, la investigadora Kinsey Milhone ha logrado, a lo largo todas estas novelas del ‘Alfabeto del Crimen’ una biografía muy sólida.

A saber, nació el 5 de mayo de 1950. Sus padres murieron en un accidente de coche cuando ella tenía cinco años y se fue a vivir con su tía Gin, quien le enseñó a hacer ganchillo, a tricotar, a planchar, muchas cosas que no hace en su vida cotidiana, pero que sabe hacerlas. A los ocho años le enseñó a disparar. Kinsey Millhone lleva a sus espaldas tres muertos. A todos los mató en defensa propia.

Ronda los 40, se ha divorciado dos veces, es ex policía, vive en un apartamento minúsculo que antes era un garaje y está un poco enamorada de su casero octogenario. Sue Grafton da estos datos casi siempre al comienzo de sus novelas e inmediatamente Kinsey cae simpática a todo el mundo. Es curioso que en casi todas las historias la detective está rodeada de personas mayores: Henry Pitts, su casero y amigo, va a cumplir 88 años; sus tres hermanos son nonagenarios; Charlotte, la actual novia de Henry, tiene 78; el propio Gus ronda los 90; Rosie, la propietaria del restaurante adonde acude Kinsey supera los 80. Todos aparecen en una excelente forma y forman una extraña familia feliz.

Kinsey no cuida demasiado su imagen: siempre lleva tejanos y zapatillas, sólo tiene un vestido y se corta el pelo ella misma con unas tijeras de manicura. Es atlética, corre todos los días cinco kilómetros y en alguna novela se ha apuntado a un gimnasio y ha tenido incluso entrenador personal.

Es adicta a la comida basura y nunca cocina: su plato estrella son bocadillos de pepinillos con manteca de cacahuete. Para contrarrestrar a tanto investigador gourmet. Vive en la hermosa ciudad de Santa Bárbara, California, que en la ficción se llama Santa Teresa.

Otro detalle es su coche: un escarabajo al que parece no prestar muchos cuidados. Claro que el escarabajo ha pasado por algunos duros avatares. Cosas de los malos.

(Fuente: Boquitas pintadas)

Por Itsaso Álvarez

Sobre el autor

Archivos

Entradas recientes


agosto 2011
MTWTFSS
1234567
891011121314
15161718192021
22232425262728
293031