Se estima que hay en el mundo unos 100 millones de niñas víctimas del trabajo infantil.
No hace falta ser muy listo para ver que esta niña es demasiado pequeña para tener esta dedicación, que trabaja y vive en la calle en malas condiciones, que lleva a cabo una actividad que está impidiendo el acceso a la escolarización…
¿Cuál es la otra cara? Incluso los más fervientes partidarios del no-trabajo infantil reconocen que tareas apropiadas como la venta del miswak en la calle pueden aportar a los niños habilidades y responsabiliades, mantener unidas a las familias y contribuir a los ingresos familiares.
En Colomba vemos que es una niña que está creciendo demasiado deprisa.
En la foto de abajo, también de EFE, una mujer pide hoy en una céntrica plaza de Murcia. Las organizaciones que trabajan con colectivos en situación de pobreza y exclusión social en la región prevén que 2012 y 2013 sean años aún más duros que los hasta ahora soportados por la crisis económica si no reciben subvenciones de las administraciones públicas para prestarles ayuda.
En Colomba vemos que esta mujer está envejeciendo… en la calle.