Para detectar la contaminación y conocer la acumulación de contaminantes en los seres vivos es interesante la utilización de especies salvajes como centinelas. Uno de los grupos que se está empezando a estudiar son las aves rapaces. Pilar Gómez, de la Universidad de Murcia, ha reunido a 14 investigadores de 13 centros de 9 países de Europa para conocer lo que se hace en el continente para localizar contaminantes en las aves rapaces. Pretenden demostrar el potencial, según las directivas de la Unión Europea, que supone coordinar los estudios regionales que utilizan rapaces como centinelas de la contaminación.
Encuentran que, en los últimos 50 años, se han hecho 52 campañas de seguimiento de la contaminación con rapaces en 44 países europeos, con Suecia, Alemania e Italia a la cabeza, y todas con una duración superior a 5 años. En España se han hecho cuatro campañas de 1992 en adelante. Los últimos 20 años se han hecho 23 campañas y todavía siguen en 15 países. En las rapaces, durante estas campañas, se ha encontrado insecticidas organoclorados, PCBs y metales. En 6 países, por lo menos, han aparecido fungicidas, productos ignífugos y venenos contra los roedores (son parte importante de la dieta de muchas rapaces). Para estudios futuros, en el 77% de estas campañas se han guardado y archivado las muestras.
Las especies más investigadas en 6-10 de los países son el Busardo Ratonero, Cernícalo Vulgar, Águila Real, Pigargo Europeo, Halcón Peregrino, Cárabo Común y Lechuza Común. Se analizan, sobre todo, plumas y huevos y, rara vez, tejidos del cuerpo, sobre todo el hígado.
Los autores detectan falta de coordinación entre estas campañas de muestreo, sobre todo con los países de Europa oriental. Si existiese esa coordinación, las campañas se podrían hacer a nivel continental y serían mucho más eficaces.
*Gómez-Ramírez, P. y 14 colaboradores. 2014. An overview of existing raptor contaminant monitoring activities in Europe. Environment International 67: 12-21.