La expedición Naturgas Broad Peak 2010, integrada por Alberto Iñurrategi, Juan Vallejo y Mikel Zabalza, ha terminado la segunda fase de aclimatación y se tomará dos días de descanso antes de iniciar la tercera y última previa al ataque a las tres cumbres del Broad Peak (8.047 metros) abriendo una nueva vía en estilo alpino.
Según infornó ayer su equipo de apoyo, los tres montañeros vascos han llegaron ayer al Campo Base tras completar la segunda fase de aclimatación en altura, que ha consistido en utilizar la vía normal al Broad Peak para pasar dos noches a 6.300 metros.
Ahora se tomarán dos jornadas de descanso hasta afrontar la tercera y última fase de aclimatación, para la cual pasarán alguna noche por encima de los 7.000 metros.
Los expedicionarios ha valorado de manera positiva lo adecuado de su preparación previa, ya que han podido vivaquear dos noches a 6.300 metros de altitud sin experimentar ningún tipo de problema. Ayer incluso trataron de alcanzar los 7.000 metros, pero en el límite de los 6.600 se encontraron de improviso con placas de hielo para las que no disponían del material adecuado, por lo que se vieron obligados a regresar.
Para las 48 horas que pretenden descansar, los partes meteorológicos anuncian mal tiempo. Si mejora el tiempo y puede llevarla a cabo, la expedición iniciará mañana la tercera fase de su aclimatación a las condiciones extremas que impone la altitud tomando la vía normal del Broad Peak y pasando alguna noche en la cota de los 7.200 metros.
Conseguir superar sin problemas periodos de 48 a 72 horas en altitudes superiores a 6.000 y 7.000 metros es fundamental en un proyecto como el de la Expedición Naturgas Broad Peak 2010, que pretende coronar los tres picos de esta montaña en estilo alpino, es decir, sin porteadores, sin cuerdas fijas y sin oxígeno artificial.
Para alcanzar el reto que se han marcado, Iñurrategi, Vallejo y Zabalza se verán obligados a pasar varias noches por encima de los 7.000 metros y, probablemente, una por encima de los 8.000.
La expedición vasca pretende acceder a las tres cimas del también llamado K3 (pico Norte, 7.550 metros; central, 8.013; y cumbre principal, 8.047 metros) por una vía que lleva a la cima central. Se trata de una ruta nueva y diferente a la que siguieron los polacos Kukuczka y Kurtyka en 1984, una de las dos veces que con anterioridad se ha logrado el objetivo que persiguen ahora Iñurrategi, Vallejo y Zabalza: el encadenamiento de las tres cumbres. La otra ocasión lo consiguieron los japoneses Hattori, Kitamura y Todaka en 1995.