Se acabó. “Con este viento no se puede subir al Shisha Pangma“, sentenció Edurne al recibir ayer por la mañana el último parte meteorológico. La dura realidad se ha impuesto a las ganas y la ilusión de su decimotercer ‘ochomil’. La expedición Endesa-Shisha Pangma’09 recoge sus cosas y se vuelve para casa. Ni siquiera han podido agotar el plazo que se habían marcado hasta el día 20 para intentar un último ataque a cumbre después del duro golpe que supuso para ellos el pasado domingo descubrir que su único campo de altura había volado –literalmente-, incluido todo el material necesario para la escalada.
Los partes que desde Portugal les envía el experto meteorólogo Victor Baia no dejan lugar a las dudas. El ‘jet scream’, ese viento huracanado que sopla en las alturas del Himalaya y que anuncia la inminente llegada del invierno, arrecia sobre el Shisha Pangma y en esas condiciones intentar llegar a los
Así que no han quedado más opciones. Por cuarta vez, Edurne Pasaban se vuelve a casa sin la cumbre del único ‘ochomil’ íntegramente situado en suelo tibetano. Nunca ninguna otra montaña se le ha resistido tanto a la tolosarra. Ni el Everest, que subió al tercer intento.
Así que es fácil comprender que sus ánimos estén por los suelos. Ayer ya escribió sus amargas sensaciones en el blog de’ Al Filo’ y hoy no ha tenido más remedio de rendirse a la evidencia y despedirse de todos , a la vez que agradecerles su apoyo.