Desde el Campo Base del Everest, donde junto con Alberto Iñurrategi y Juan Vallejo se aclimata para intentar la cara norte en estilo alpino, Juan Vallejo ha publicado en el blog de la expedición una interesante reflexión sobre el estilo en el alpinismo actual. Básicamente, el vitoriano apela al respeto a la montaña y a la historia para no devaluar ciertas vías ascendiéndolas en un estilo menos ético de como se abrieron hace años (en algunos casos décadas). Y pone como ejemplo la británica de la cara suroeste del Shisha Pangma, donde los miembros de alguna expedición, según él mismo explica, le han confesado sin pudor alguno que van a coserla con cuerdas fijas pese a que en su día fue abierta por Doug Scott y compañía en estilo totalmente alpino.
Este es su comentario:
S.O.S. en el SHISHA PANGMA
“Desde hace algún tiempo, uno empieza a tener ya una edad, hay ciertas cosas de estas grandes expediciones de las que uno empieza a estar terriblemente cansado, pero en cambio también se aprende a apreciar otras en las que apenas hace unos años ni siquiera reparaba, como son el tiempo libre para pensar, leer e incluso a veces como en esta ocasión para escribir.
También es una buena oportunidad para conocer gente y para intercambiar ideas con quienes se acercan como nosotros desde todos los lugares del mundo al Himalaya a escalar montañas. Ha sido precisamente en uno de estos cambios de impresiones con grupos que tenían la intención de intentar la cara suroeste del Shisha Pangma lo que nos ha dejado sin palabras ya que sin ningún tipo de pudor nos cuentan que tienen la sana intención de equipar con cuerdas fijas la ruta que tan brillantemente abrió en el año 1980 un grupo de británicos con Doug Scoot a la cabeza en un impecable estilo alpino.
Leía estos días en una conocida revista de montaña un interesante articulo de escalada, donde además de una buenísima información sobre las últimas rutas abiertas en Montrebei, el autor reflexionaba sobre la particular ética que durante muchísimos años ha perdurado en esta zona a la hora de abrir nuevos itinerarios; ética que se ha mantenido hasta nuestros días como un ejemplo de respeto a los aperturistas y a una determinada manera de entender la escalada, conviviendo además perfectamente con otras formas y estilos tan radicalmente diferentes como lícitos que se practican a pocos kilómetros de distancia. ¿Es esto imposible en el Himalaya?, ¿acaso el hecho de estar en un país ajeno o de pagar un permiso nos da derecho a olvidar la historia e ignorar de forma descarada una forma de escalar que se ha mantenido durante, al menos que yo sepa, 25 años en este lado de la montaña?.
Desde que los británicos abrieron la primera ruta en esta pared y hasta donde llega mi información, todas las vías que se han abierto en esta vertiente del Shisha lo han sido en estilo alpino y al menos hasta principios de este siglo el respeto a esta forma de escalar se ha mantenido escrupulosamente en todas las repeticiones como si de una ley no escrita se tratara, incluyendo varias a manos de vascos y catalanes y dos aperturas de estos últimos.
Fue a partir de principios de este siglo cuando algunos grupos de desaprensivos abrieron la veda de la colocación de cuerdas en este pequeño santuario de la escalada alpina y con la excusa de que ya se había hecho, grupos posteriores también se apuntaron al carro de las cuerdas fijas, porteadores de altura etc..¿Acaso no hay cada vez más lugares en el Himalaya donde se ha impuesto el uso indiscriminado de estas tácticas y cada vez menos sitios como el aquí menciono que aún guardan cierto aura de autenticidad y aventura?. Hagamos un esfuerzo entre todos para mantenerlos así. En descarga de los arriba mencionados diré que en su mayoría eran jóvenes (otros no tanto) y posiblemente desconocedores de todo esto que relato, o quizás no y prefieran mirar hacia otro lado.
Con toda seguridad estas reflexiones caerán en el gran saco roto de la ética alpina pero quizás alguien quiera recogerlas y con ello ayuden preservar este reducto himaláyico de la escalada alpina para las próximas generaciones que es la cara Suroeste del Shisha Pangma”.
Juan Vallejo.
Foto 1: Juan Vallejo, Mikel Zabalza y Alberto Iñurrategi, con la cara norte del Everest al fondo (cortesía de Naturgas/Basque Team Hornbein’09).
Foto 2: Cara Suroeste del Shisha Pangma. La vía británica discurre por el gran corredor central.