Tan sólo algunos optimistas irredentos creen que el lunes el Eustat revelará una tasa positiva, como ha sucedido en Navarra, después de consumir también tres trimestres en recesión. Pero sí es verdad que son muchos los que creen que la mejoría se verá en el cuarto trimestre y que al finalizar diciembre Euskadi habrá abandonado la recesión. Desgraciadamente habrá que esperar a febrero para que sea publicado el comportamiento de la economía de la recta final del año y, si se confirma la tesis, aflore una tasa “ligeramente” positiva.
Desgraciadamente, el efecto más evidente, demoledor y negativo de una crisis, el paro, no va a remitir. Más bien al contrario, es probable que siga creciendo durante todo el año 2010 e incluso buena parte de 2011.
Y, ¿entonces? Animo, comienza la cuesta arriba, en el sentido positivo del término, aunque la cima aún está lejos. Acabamos de terminar la bajada del último puerto.