Todas las funciones animales, incluidas la obtención y digestión del alimento, son objeto de selección natural. Esto quiere decir que los animales han desarrollado adaptaciones específicas también en lo relativo a las funciones de alimentación y digestión. Así, las características del alimento ejercen un efecto notable en un conjunto de rasgos, tanto anatómicos como fisiológicos. Es de sobra conocido, por ejemplo, que las características de la dentición de los homínidos han ido variando en función de la composición de
Pero las adaptaciones no se refieren únicamente a las características anatómicas de los animales. Las adaptaciones de base fisiológica también tienen gran importancia. Existe, por ejemplo, una relación directa entre la dieta de un animal y las enzimas presentes en su tracto digestivo. En los animales cuya dieta es especialmente rica en carbohidratos las principales enzimas digestivas son las carbohidrasas. Y lo mismo cabe decir sobre proteinas y proteasas. Estoy refiriéndome, claro está, a diferencias entre especies, pero dentro de una misma especie pueden darse grandes diferencias entre los individuos de distintas poblaciones en lo que se refiere a sus dotaciones enzimáticas.
Los san[1] y los tswanos son grupos étnicos que viven en el sur de África. Tienen un origen muy diferente, razón por la que, por ejemplo, sus respectivas lenguas también lo son. De hecho, las lenguas de los san pertenecen al grupo de las lenguas joisan (o khoisan), formado por tres lenguas africanas muy minoritarias y muy diferentes del resto de las lenguas conocidas; la lengua de los tswanos, denominada setswana, por el contrario, sí forma parte de un conjunto de lenguas africanas próximas, las lenguas bantús. Estos dos grupos étnicos habitan zonas relativamente próximas y, sin embargo, sus respectivos entornos son muy diferentes. Los san viven en el desierto del Kalahari y son de los pocos pueblos cazadores-recolectores que perviven en el mundo; los tswanos, por el contrario, son agricultores. La dieta de los san, aunque incluye algunos tubérculos y otros productos vegetales, está formada, mayoritariamente, por aves, culebras, lagartos y gamos, y la de los tswanos por maiz y mijo principalmente.
Pues bien, por una casual circunstancia un grupo de investigación sudafricano tuvo ocasión de realizar una sencilla comparación entre ambos pueblos, utilizando para ello una enzima salivar,
Los resultados de la comparación fueron muy claros. La actividad amilasa de los tsawnos fue de 248 unidades ml-1 y la de los san de 22 unidades ml-1, esto es, once veces más baja que
Esos datos, sin embargo, no nos informan sobre el origen de las diferencias observadas. Esto es, nada nos dicen acerca de si las diferencias son debidas a rasgos propios de cada grupo humano o, si por el contrario, son el resultado de una adaptación, reversible, a las características de
Lo que no no sabemos, -los investigadores no dan cuenta de ello-, es qué pensaban los san de la dieta que se vieron obligados a consumir durante esos tres meses, aunque mucho me temo que, puestos a elegir, hubieran optado por los gamos y las culebras.
[1] Los san son el grupo humano al que los colonizadores holandeses denominaron “bosquimanos”. Se considera más apropiada la denominación “san” o “khoisan”, aludiendo a un grupo étnico algo más amplio.